domingo, 11 de noviembre de 2012

Diario, de Sofía Tolstáya


Turguéniev dijo: "Por lo tanto, ¿usted encuentra que yo educo mal a mi hija?" L.N. respondió a eso, que él pensaba eso que decía, y que, sin referirse a las personas, simplemente expresaba su idea. Turguéniev se enojó y dijo de pronto: "Y si usted va a hablar así, yo le daré por la jeta".
L.N. se levantó y se fue a Bogoslóv, una estación que se hallaba entre nuestra posesión, Nikólskoye, y la posesión de Fet, Stepánovka. Desde allí Liev Nikoláevich mandó por las armas y las balas, y a Turguéniev una carta con un reto por insulto. En esa carta le escribía a Turguéniev que no deseaba batirse de manera trivial, o sea, que dos literatos llegaran con un tercer literato, con las pistolas, y el duelo terminara con champagne, sino que deseaba batirse de verdad, y rogaba a Turguéniev ir a Bogoslóv al lindero del bosque con las armas.
Toda la noche Liev Nikoláevich no durmió y esperó. Hacia la mañana llegó una carta de Turguéniev sobre que, al contrario, él no convenía con batirse como proponía Tolstoi, sino deseaba un duelo según todas las reglas. A eso Liev Nikoláevich escribió a Turguéniev: "Usted me teme, y yo lo desprecio, y no quiero tener ningún asunto con usted".

Título original: S.A. Tolstaya, Dnevniki.
Imagen: Nikolai Ge, Portrait of Sofia Tolstaya, XIX.